Ni siquiera los estragos ocasionados por el Huracán Alex detuvieron el servicio a clientes que ofrece Aba Seguros. A pesar de que este fenómeno natural arrasó con la Ciudad de Monterrey, los colaboradores de esta firma aseguradora se mantuvieron en sus puestos de trabajo atendiendo todas las llamadas que caían como la mismísima tormenta.
El compromiso de los colaboradores del call center fue tal que el 1 de julio, al ver que muchos de sus compañeros no pudieron llegar a las instalaciones de Aba, decidieron quedarse para continuar atendiendo las llamadas de los clientes que llamaban desesperados por la pérdida de sus autos y sus casas.
Fueron 43 colaboradores del área de Cabina que decidieron permanecer en las instalaciones; 13 de ellos, incluso, trabajaron durante 36 horas continuas, dejando a un lado si su propia casa o auto se había deteriorado a causa de Alex.
Como sabemos, la tormenta no cesó en días. Y tampoco el compromiso y la labor de los colaboradores de Aba: 38 personas trabajaron sin parar en el área de servicios atendiendo más de mil casos. Cinco colaboradores de este grupo se dedicaron a orientar y dar información al resto de sus compañeros que, o llegaban a las oficinas, o bien, salían rumbo a casa (si es que todavía quedaba en pie), ya que algunas partes del edificio y de la ciudad se encontraban inundadas.
Gracias a este compromiso, un cliente de Aba pudo localizar uno de sus tres autos a cinco cuadras de su casa y solicitar su indemnización de manera inmediata… lo que no sucedió con los otros dos coches, que estaban asegurados con otra compañía.
Por si fuera poco, Aba decidió que tenía que dar todavía más por una ciudad que estaba inundada. Así que como apoyo a la comunidad de Monterrey, sus colaboradores regalaron 100 canastas básicas. Incluso, realizaron aportaciones monetarias para aquellos colegas que se vieron gravemente afectados por el fenómeno, pues hubo quienes perdieron su casa, muebles y autos. Otros tuvieron que irse a un refugio.
El esfuerzo, el compromiso y la excelencia en el servicio fueron reconocidos por el director general durante un desayuno muy emotivo en donde galardonó con un diploma a todos los colaboradores que se mantuvieron al pie del cañón durante días enteros, dejando de lado su propia tragedia para continuar atendiendo al cliente. Y todo sin esperar absolutamente nada a cambio.
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